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martes, 21 de agosto de 2012

El deporte en los niños de 9 a 12 años


El deporte en los niños de 9 a 12 años

El deporte es una actividad central en la vida de las personas y la niñez y adolescencia no está exenta de él. La práctica deportiva entre los 9 y 12 años tiene no solo beneficios físicos y asociados a la salud corporal sino también otros asociados a la salud mental y el aprendizaje y rendimiento académico.
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Cuando los chicos de este grupo etario participan activamente de actividades deportivas desarrollan, según Eric Small, camaradería, aprenden habilidades de liderazgo, enriquecen su autoestima y forjan amistades más duraderas.
Las chicas a esta edad, tienden muchas veces a abandonar la práctica deportiva y suelen necesitar más estímulo que los varones para sostenerla.
Elegir un deporte a esta edad (o elegir cuáles sostener) tiene que ver con varios factores entre los que Small señala: tamaño, peso, características de personalidad y tipo de deporte (de contacto o no de contacto). Lo importante, según este autor, es privilegiar que la práctica deportiva sea enriquecedora desde lo socioafectivo y no sometida a la presión del adulto por participar en competencias y eventos de rigurosidad deportiva.
De acuerdo a Small, en las sociedades occidentales industrializadas, se ha tomado la costumbre de hacer competitivos los deportes para los chicos desde temprano, disminuyendo el valor de medio de inserción social y desarrollo de habilidades socioafectivas que el deporte siempre tuvo e incrementando a partir de sostener niveles de competitividad no ajustados a la edad de los chicos, el nivel de estrés vivido por ellos durante la realización de este tipo de actividades. Es así que la exagerada tendencia a hacerlos competir puede trabajar en detrimento de la capacidad de los chicos de practicar deportes con alegría y entusiasmo y a favor de convertirla en una fuente de estrés y ansiedad que nada bueno otorgan al chico en desarrollo.
Cuando los adultos establecen presión sobre la práctica deportiva de los chicos, los chicos pierden el disfrute y es importante que ellos disfruten la práctica para forjar hábitos deportivos hacia la adultez. Por otra parte, los chicos tienden a abandonar la práctica deportiva cuando la presión y el estrés sobre ella puesta se intensifican.
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Small sugiere no acomodar cada espacio libre de los chicos a una actividad extracurricular sea esta deportiva o no. Es importante recordar que los chicos necesitan tiempo para jugar, descansar, sostener actividades de ocio y participar de la vida familiar.
Para seleccionar la actividad deportiva para un chico de esta edad Small propone considerar:
-    Considerar el nivel madurativo tanto de lo motor y manejo del físico como de habilidades sociales y emocionales que son necesarias para llevar adelante y disfrutar la práctica deportiva. Chicos sociables que se integran con facilidad a los grupos disfrutarán más de deportes en equipo (como el futbol o rugby) a tiempo que chicos temerosos o menos sociables disfrutarán más de deportes individuales como el tenis o la natación.
-    Antes de llegar al momento en el que hay que decidirse por la práctica de un deporte en particular, es bueno que los chicos sean expuestos a tantos deportes como se pueda para diversificarles la experiencia deportiva y ofrecerles amplio abanico de opciones.
-    Respetar las características de personalidad y no pretender espíritu competitivo y agresividad en el intercambio por parte de chicos que no tienen naturalmente esa predisposición, ello solo llevará al sufrimiento.
-    Sostener pautas sanas de alimentación que preparen a los chicos a iniciar la práctica deportiva en la adolescencia (período más competitivo desde lo deportivo) con hábitos sanos en lo que a alimentación y ejercicio se refiere.
Es asimismo importante involucrarse en la actividad deportiva de los chicos en tanto representa tiempo compartido y una vía fácil de ofrecer compañía y soporte en las actividades que para ellos son importantes. Acompañarlos a las prácticas y partidos otorga oportunidad de afianzar lazos con ellos y, al mismo tiempo, espacios de conversación y tiempo de calidad para intercambiar experiencias.
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Por otra parte, también es recomendable la práctica familiar de actividad física, andar juntos en bicicleta, caminatas etc. para afianzar lazos familiares y obtener tiempo de calidad para el intercambio. La actividad física conjunta otorga físicamente sensación de camaradería que se traduce en sentimientos de bienestar por el tiempo compartido.
En palabras de Humphrey, la actividad deportiva es tan importante para el desarrollo de los chicos como la actividad social e intelectual. La mente y el cuerpo trabajan y se desarrollan en conjunto. Aislar un chico de la actividad física es producir un desbalance en sus posibilidades de desarrollo tanto como lo es alejarlo de la práctica de actividades de tipo intelectual y socioafectivas. Acompañarlos en la práctica sana de deportes que a ellos los haga felices es otra de nuestras responsabilidades como padres.
Referencias:
Eric Small. (2010) Kids and sports: everything you and your child need to know about sports, Physical activity and good health. A doctor´s guide for parent´s and coaches. Read how you want.
Humphrey J (2008). Child development through sports.  Routledge.

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